23 septiembre, 2006

¡Es preocupante!

En El Diario Vasco tienen un grave (me atrevería a decir: preocupante) problema con el verbo "preocupar". Al parecer no hace falta ser un anglófono nativo para liarse la manta con la relación sujeto/objeto indirecto que establecen los verbos interesar, gustar y demás.

Empecemos con la Prueba Uno, uno de esos artículos "de estadísticas". Ya saben, ésos en los que el periodista coge un gráfico sencillo y comprensible y lo transforma en un artículo de cinco columnas que acaba no teniendo ningún sentido en absoluto. Pero lo que nos concierne es la frase:

El 12% dice no preocuparle estos temas.
"Estos temas" son los políticos, pero da igual, a nosotros tampoco nos preocupan ahora mismo. Lo importante es que TODO parece estar mal en esta frase. Qué frase tan fea, por Jennifer Garner; parece haberla escrito el que elige los trajes de Bai Ling.

Para empezar, no se puede poner el verbo así, en infinitivo, si no tiene el mismo sujeto que la oración principal: "Él dice comer verdura todos los días" tiene sentido (él dice que él mismo come verdura), pero *"Él dice interesar por la tele"... Ni siquiera sé cómo terminar esa frase. ¿Él dice que interesa... quién? Lo correcto sería decir "El 12% dice no estar interesado en estos temas", de manera que concuerden la principal y la subordinada. El "le" no hace sino afear más la frase, ya que da la impresión de referirse a un tercero que no aparece en la conversación, o peor, puede hacernos pensar (incorrectamente) que se refiere a "estos temas" y que por consiguiente debería ser "les". En inglés la frase podría ser 12% claim not to be interested in such subjects, con perfecta concordancia, pero ya se sabe: I like chocolate, "El chocolate me gusta a mí".

Pero es que eso no es todo. Pasan 24 horas y la redacción no sólo ha vuelto a meter la pata con el verbo "preocupar", sino que han ascendido su error de categoría y lo han lanzado a la primera plana (hay una Ley de Murphy al respecto, no me cabe duda). Veamos la Prueba Dos, que por lo demás parece ser la misma noticia del día anterior pero algo embellecida:


Los jóvenes aprecian vivir en Euskadi pero les preocupa la vivienda y el paro.

Es posible que no sea necesario, pero de todos modos les contaré algo. Una cosa y otra son dos cosas. Una cosa. Otra. Una y otra. Dos. A mí, personalmente, no me parece tan complejo, pero parece que no todo el mundo vio ese episodio de Barrio Sésamo en concreto. La lengua castellana nos permite flexionar nuestros verbos para reflejar mejor la realidad a la que se refieren, de modo que podemos decir "A los jóvenes les preocupan dos cosas: la vivienda y el paro".

El problema es que el titular no "suena" del todo mal, porque encaja con el patrón al que estamos acostumbrados en el discurso hablado: cuando hablamos, es normal que reconstruyamos la frase varias veces a medida que nos corregimos, cambiamos de opinión, o sencillamente nos olvidamos de lo que queríamos decir. Es muy común que alguien empiece a decir "A los jóvenes les preocupa el paro...", pensárselo mejor, y añadir "... y la vivienda". Como no podemos viajar en el tiempo para añadir una -n al verbo, pues se deja así. Pero los procesadores de texto son una maravilla, y permiten la corrección en el texto escrito.

3 comentarios:

SiN auReoLa dijo...

Me he entretenido bastante leyendo a grandes rasgos vuestro blog, pero dudé bastante en dejar un post, por miedo a caer en alguna incorcordancia gramatical..jajajaja.
Soy de Chile, y déjame decir que poseemos la más mala y distorcionada forma de escribir y hablar.
Felicidades y espero vuestra visita.

Anónimo dijo...

mart, tio, da miedo ablar contigo, o mejor dixo, escribir. asi q via ponerlo to mal pa q no sakes fallos :D

pero ma molau, y asi asi, renovnado cad dos dias

Mart dijo...

Ya he dicho que todas las aportaciones cuentan! Además, debería ser evidente que comerse una mayúscula en un blog de Internet no es lo mismo que hacerlo en un periódico que te paga por trabajar en él :P